viernes, septiembre 02, 2005

yo la cuido...

Noviembre, 1983
Al fin!!!, hoy es mi cumpleaños, cumplo DOS años y mi mamá me tiene organizada la mejor fiesta, pero ahora todos en mi casa andan raros y mi mamá, que anda con una guata gigante, dice que se tiene que ir. ¿Pero como?, si es MI cumpleaños, ¿te acuerdas mamita que teníamos todo preparado?- le digo por si se le olvidaba. -Las tías se van a quedar contigo, guatón!, tienes que hacerles caso y portarte bien, ¿ya?- me dice con cara de apuro. ¡Pero yo quiero ir!-le respondo y me agarro con todas mis fuerzas a su guatita.
Ya nadie me escucha. Todos pendientes de mi mamá y de su enorme barriga. Va a nacer tu hermanita!-me dicen- tremendo regalo que te llegó!-. ¿Y a mi que mi importa?, ¿porque tenía que ser justo hoy?, ¡aguafiestas!.....además que me tinca demasiado pesada y mala para el fútbol.
Tengo penita y parece que nadie se acuerda mucho de mí, así que aprovecho de escabullirme hacia al patio. Después de mucho rato de esperar a mi mami, sentado en columpio-neumático, me obligan a ir con ellos a ver a esa intrusa con cara de mono.
Cuando llegamos a la clínica, mi mamá se ve radiante y feliz, se debe haber acordado al fin que hoy es mi cumpleaños. Pero no, insisten en que vea a la enana...¿Porqué es tan arrugadita y roja, mamá?- le digo con carita de inocente, mientras pienso para mis adentros que, en realidad, es bien feita. Como los veo a todos tan emocionados, me guardo el comentario y le doy una oportunidad. Según mi mamá, hasta yo era igual de feito cuando nací, así que le doy el beneficio de la duda por un tiempo.
Ahora me dice que le haga "nanai" a la mona chica, que no la mueva tan brusco. Como si fuera muy entretenido estar ahí, la pobre es tan fome, si ni se mueve.
Asi que me quedo mirándola un rato hasta que, de repente, abre sus ojitos, me mira y me reconoce. Aunque sigue sin moverse mucho, me empieza a caer bien de a poquito.
Trato de hacerle cariño, ahora menos brusco, así como lo hace mi mamita antes de que me duerma, como si estuviéramos solitos en el mundo los dos.
Así tan chica y dormilona, necesita de un grande como yo, que le enseñe las cosas entretenidas que hay en el barrio, los perros de la plaza, porque al principio dan un poco de susto, mi columpio-neumático, que es el más bakan de la cuadra, mi pelota roja gigante o mi autito azul, aunque mejor que le compren otro a ella, porque a mi autito azul yo lo cuido y no se lo presto a NADIE...Aunque quizás sí, ahí voy a ver mejor, porque me sigue mirando con unos ojitos de paz que hipnotizan y me dan ganas de quedarme ahí juntitos los tres para siempre.
Bienvenida!!- le digo y la vuelvo a apretar bien fuerte y mi mamá me reta: Pablo! no tan brusco!, ella es chiquitita, la tienes que cuidar-.... ¡Como si no supiera!.
Yo la cuido mamita, yo la cuido- le digo- y la abrazo ahora más despacito y la perdono por ser tan desubicada por nacer justo el día de mi cumpleaños....
Noviembre, 85
Mi hermana se consolidó como aguafiestas..ahora resulta que se enfermó y se está perdiendo nuestra super fiesta de cumpleaños, estan todos nuestros amigos del jardín y ella ni se aparece.
Mi mamá anda pendiente de ella, de que le baje la fiebre y yo la voy a ver de vez en cuando pa contarle como está la fiesta afuera, a ver si se deja de tonteras y sale a jugar.
La pobre tiene una cara de pollo!!!, así que la ayudo a vestirse y salimos a la fiesta.
Al salir me encuentro con mi mamá que me mira con ojos de huevo frito, y yo le digo para tranquilizarla: mamita, no te preocupes, si se mejoró!.
La mamá anda así de asustada y nerviosa desde que la ridícula de mi hermana volvió de la clínica, hace unos días atrás. Los doctores no la pudieron despertar en varios días, porque "tenía algo en el pulmón" me dijeron. Para mi que era de pura floja, pero acordándome de mi promesa le digo, con ojos de grande: yo la cuido mamita, yo la cuido!. Ella suspira, le toca la frente y pone una cara de alivio, de esas de cuando me encuentra en el supermercado, justo cuando yo estaba de lo mejor jugando a la escondida.
¿Viste?, le digo, si era de puro floja. La mamá se ríe y me deja salir con ella, mientras que la enana sigue con cara de pollo y ni siquiera me da las gracias.
Después, la ridícula se pone a cantar canciones de mazapan en su idioma y continua siendo la reina de la fiesta por un rato. Yo me quedo viéndola y me doy cuenta de que a veces hasta la echo de menos. A pesar de que es super catete y me robe mis juguetes o que todos la tengan tan mimada y le hagan caso en todos, o que siempre se haga la buena y se quede tan tranquilita con su cara de pollo que convence a todos y terminen siempre retándome a mí
Afuera todos la reciben como una reina, yo la dejo que se crea un rato y la apreto bien fuerte. Ella me regala su loly, y me da un beso pegote.....feliz cumpleaños! -le digo- y no flojees más ¿bueno?-...
Mi mamá nos mira de lejos, asi que disimulo y le pegó otro cachuchazo pa que me devuelva los chocolates que me está robando....Pablo!...no seas tan brusco!!!- grita mi mamá de nuevo con ojos de huevo frito...Pero si yo la cuido mamá....no seas porfiada....
Yo la cuido....